Las últimas medidas tributarias del Gobierno encaminadas a potenciar el nivel de recaudación topan con el rechazo del Congreso. La Cámara ha votado en contra de lo que la oposición denomina el "infierno fiscal" de Pedro Sánchez dando apoyo a cuatro de los cinco puntos incluidos en una moción de los populares que insta al Ejecutivo a dar marcha atrás en las subidas de impuestos.
Recuperar el IVA superreducido -2%- de la cesta básica de alimentos y la rebaja al 10% del que grava la electricidad y el gas; neutralizar el impuesto a la producción de la energía eléctrica estableciendo un tipo del 0% en tanto en cuando el sistema eléctrico no genere déficit de tarifa; deflactar la tarifa del IRPF para ajustarla a la inflación y, sobre todo, elevar el mínimo exento del impuesto sobre la renta para evitar que los beneficiarios del salario mínimo tengan tributar, han sido las propuestas que han salido adelante apoyadas por la mayoría de la Cámara y todas ellas con el voto en contra del PSOE.
Las mociones, al igual que las proposiciones no de ley, no son vinculantes para el Ejecutivo, de manera que no cabe esperar que el Gobierno atienda la petición del Congreso, pero ello no impide poner de manifiesto que la mayoría de los grupos parlamentarios considera excesivas, e incluso confiscatorias, como recalcan los populares, las últimas decisiones tendentes a elevar los niveles de recaudación.
Las medidas que afectan al IVA de los alimentos básicos, así como al impuesto que se aplica al consumo de electricidad y gas, entraron en vigor el pasado 1 de enero como consecuencia de la decisión del Gobierno de empezar a revertir las ventajas fiscales aprobadas para superar los efectos negativos de la crisis de la pandemia y la guerra en Ucrania. En concreto, estas dos rebajas no se incluyeron en el decreto ómnibus, aprobado finalmente de forma parcial, que prorrogaba algunos beneficios impositivos para hogares y empresas, de manera que ambas recuperaron los niveles previos a la crisis.
La propuesta de recuperar el IVA de los alimentos básicos al 2% hasta el 31 de diciembre de 2025 consiguió el apoyo de 170 diputados -PP, Vox, UPN y BNG- frente al voto en contra de 168 -PSOE, Sumar, ERC, Bildu, PNV, Podemos y Coalición Canaria- y la abstención de los siete escaños de Junts.
Recuperar las medidas fiscales para rebajar el recibo de la luz y el gas, reduciendo el IVA que en la actualidad se sitúa en el 21%, así como neutralizando el impuesto sobre el valor de la producción eléctrica, estableciendo un tipo del 0% mientras el sistema no genere déficit de tarifa, salió adelante con 171 votos a favor -PP, Vox, UPN y BNG- frente a 167 en contra - PSOE, Sumar, ERC, Bildu, PNV, Podemos y Coalición Canaria- y siete abstenciones de Junts.
Por lo que se refiere a la propuesta de llevar a cabo las modificaciones necesarias de la tarifa del IRPF para ajustarla a la inflación y así compensar la pérdida de poder adquisitivo derivada de la "progresividad en frío", modificando al menos los tres primeros tramos, los mínimos personales y el resto de las deducciones que atienden a circunstancias personales y familiares, obtuvo el respaldo de 175 diputados -PP, Vox, PNV, UPN y CC- frente a 163 -PSOE, Sumar, ERC, Bildu y Podemos- y ocho abstenciones de Junts y BNG.
Igualmente, la mayoría del Congreso apostó por elevar el mínimo exento del IRPF y modificar las retenciones para garantizar que quienes cobran el salario mínimo interprofesional, actualmente de 16.576 euros anuales brutos, no tengan que tributar por este impuesto. Esta demanda consiguió 211 votos a favor -PP, Vox, Sumar, ERC, PNV, BNG, CC y Podemos-, frente a 121 en contra -PSOE- y 13 abstenciones de Junts, Bildu y UPN.